¡Oh país grande y hermoso, oh país en el
que vivo!
Oh país grande y hermoso, oh país en el que vivo,
de riquezas derrochadas por el más “fuerte” y “altivo”
Grandes ríos espumosos, fuertes aguas y corrientes
nauseabundas que se pudren por la mano de sus gentes.
¡Oh país grande y hermoso, oh país en el que vivo!
Con paisajes habitados por salvajes animales
que nos causan grandes penas disfrazadas de ideales.
Donde buenos habitantes dicen ser los más felices,
aunque ser feliz radique en ignorar los días grises.
¡Oh país grande y hermoso, oh país en el que vivo!
Con su cóndor fiel que vuela en su libertad fehaciente,
aquel cóndor desplumado cual carroña, que desciende.
Con sus mares y fronteras de bellezas desbordantes
Que nos han sido tomadas mientras otros se hacen grandes
¡Oh país grande y hermoso, oh país en el que vivo!
Con su rojo atardecer, con el rojo de sus rosas
con el rojo de la sangre que se seca en el olvido
Esa sangre que recorre cada espacio de mis venas
eres tu ese fiel amor de mi corazón herido.
¡Oh país grande y hermoso, oh país en el que
vivo!